La piedra en sí no tendría tanta importancia sino fuera que habla de un mesías que resucitó al tercer día, y que no encaja con la fechas en las que vivió Jesús.
Es una piedra en forma de losa o tableta, encontrada en las cercanías del Mar Muerto, en Jordania.
La losa tiene 1 m. de largo y contiene 87 líneas escritas.
La lástima es que la piedra está rota y falta parte de la escritura. Está escrita a doble columna, similar a los antiguos escritos de la Torá.
La piedra se descubrió en 1998, por un coleccionista suizo de origen judío, David Jaselshon, que se la compró a un comerciante de antigüedades jordano.
 |
| Foto de The New York Times en la que podemos ver a David Jaselshon |
Gracias a un conocido suyo, experto en lengua hebrea, Ada Yardeni, la piedra fue adquiriendo valor e importancia, puesto que junto al experto en escritura Benjamin Eltzur, tradujeron la inscripción.
Según estos expertos, este tipo de escritura es típico del siglo I a.C. Según el profesor de arqueología Yuval Goren, de la Universidad de Tel Aviv, no hay que dudar de la autenticidad de la piedra.
Según estos expertos, este tipo de escritura es típico del siglo I a.C. Según el profesor de arqueología Yuval Goren, de la Universidad de Tel Aviv, no hay que dudar de la autenticidad de la piedra.
La famosa tabla de piedra, nos cuenta entre otras cosas, que un mesías se enfrento a los romanos, liderando una rebelión, murió, y al tercer día, resucitó gracias a la intervención del ángel Gabriel. Y no era Jesús porque este mesías no murió en la cruz. Murió combatiendo a los romanos, quienes después de matar al mesías, crucificaron a unos 2000 seguidores para escarmiento de la población judía de la época.
Es evidente, si la piedra no es una falsificación, que Jesús conocía la historia.
El profesor Israel Knohl cree que se trata de Simón de Perea, uno de los últimos mesías (parece ser que en la época de la invasión romana hubo varios mesías) del siglo I antes de Cristo. Si realmente fuera Simón estaríamos hablando del año 4 a.C. cuyas gestas describe Josefo el Eslavo, historiador de la época.
Los escépticos creen que lo más extraño es que la piedra esté escrita con tinta y no grabada. Por eso le llaman "El Manuscrito del Mar Muerto en Piedra"
En fin amigos, igual que los Manuscritos del Mar Muerto, los expertos no pararán hasta dar una explicación convincente sobre la veracidad del la famosa LOSA DE GABRIEL.
Fuentes:
http://www.bib-arch.org/news/dss-in-stone-news.asp
http://spectrummagazine.org/node/826
Interesante, no conocía el hallazgo.
ResponderEliminar