En el golfo de Khambhat, cerca de la costa de Guyarat, en el año 2001 el ministro de Ciencia y Tecnología de la India, anunció el descubrimiento de una ciudad sumergida. Un equipo de científicos ya llevaba varios meses trabajando en el descubrimiento con modernas técnicas acústicas. Era un descubrimiento asombroso.
Las ruinas se encuentran a una profundidad de unos 40 metros, y el equipo de investigadores distribuyó varias muestras que fueron enviadas a diferentes laboratorios de la India, Reino Unido y Alemania.
Como siempre, hay quien ve en estas ruinas formaciones naturales, y que las muestras de cerámicas son también restos de rocas naturales del fondo del mar.
Si fuera por estos negacionistas, aún estaríamos en la edad de piedra.
Pero he aquí que entre las muestras se encontraba una pieza de madera datada por el método del radiocarbono por dos laboratorios diferentes y dio como resultado que la pieza era del 7190 al 7500 años antes de Cristo.
Se cree que estas ruinas podrían pertenecer a la ciudad de Dwarka, la ciudad sagrada del hinduismo, Jainismo y Budismo. Es una de la siete ciudades sagradas de la religión hindú. El nombre fue dado por el dios Krishna. La ciudad tenía miles de palacios y por lo visto, con edificios de muchas plantas. Abundaban los recubrimientos de oro y plata.
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