viernes, 18 de febrero de 2011

JESÚS VIVIÓ Y MURIÓ EN CACHEMIRA



Desde este humilde blog, mi más sincero homenaje a Andreas Faber-Kaiser, gran divulgador de misterios sin resolver, gran conocedor de la ufología, muy bien documentado en todos los temas que tocaba, y malogradamente fallecido muy joven. Gracias Andreas por tu legado, tan extenso y tan completo.

JESÚS VIVIÓ Y MURIÓ EN CACHEMIRA, es un libro que leí hace muchos años y que en su momento, aquí en España, pasó casi desapercibido, porque en aquella época, la lectura no era un entretenimiento usual, como hoy en día se ve en las personas que viajan asiduamente en los transportes públicos y que son grandes consumidores de libros best-sellers.


¿ Habéis pensado en la posibilidad que Jesús no muriera en Cruz ?

El autor, después de una ardua investigación, con documentación aparentemente fidedigna, nos lleva a Cachemira, lugar en el que se conserva la tumba de Jesús, considerada patrimonio de la humanidad.
También nos describe la tumba de Moisés, custodiada desde el día de su muerte hasta hoy, por generaciones de guardianes que han dejado su nombre grabado en la tumba.
Todo un misterio.


Editorial: A.T.E.
Fecha de publicación: setiembre de 1976
Artículo relacionado: La vida secreta de Jesús.

SINOPSIS:
«El Libro expone la posibilidad de que Jesús no muriera en la Cruz, sino que una vez curado de las heridas causadas por la crucifixión, emprendiera la huida hacia el Este, en busca de las tribus perdidas de Israel. Jesús habría llegado así a Cachemira, en donde comenzaría una nueva vida y moriría —a edad muy avanzada— de muerte natural. Su tumba se venera hoy en Srinagar, capital de Cachemira.

Además de la tumba própiamente dicha, una serie de nombres toponímicos dan fe en Cachemira del paso de Jesús.
Por otra parte, en Pakistán y a escasos kilómetros de la frontera con Cachemira, se ha localizado la tumba de María, madre de Jesús, quien le habría acompañado en su huida hacia el Este. No soportando las penalidades del viaje, habría muerto en el camino, ya muy cerca del punto de destino.
Existen testimonios que hacen suponer que Jesús eligió este lugar para emprender la segunda etapa de su vida, por cuanto ya habría estado aquí durante los años en que la historia occidental no puede dar fe de sus actividades. Pero sí pueden darla, en cambio, textos históricos localizados en la lamasería tibetana de Lhasa y en la lamasería Hemis, en Ladakh (Cachemira).

Además de las tumbas de Jesús y María, una reducida comunidad judía aislada en la montaña viene custodiando en Cachemira, desde hace 3500 años, la tumba de Moisés, del que igualmente hablan nombres toponímicos, conservándose incluso, allí, la llamada "piedra de Moisés".
Comunidad judía de Cachemira

Andreas Faber-Kaiser y Mercedes Castellanos viajaron al norte de la India para recoger testimonios y documentación sobre el terreno, para verterla luego en este libro que dió a conocer a Occidente esta tradición de la vida secreta de Jesús.

Libro polémico desde un principio, Jesús vivió y murió en Cachemira levantó ampollas en los sectores religiosos de la sociedad española de la transición. A la rápida difusión de las primeras ediciones que catapultó el libro a las listas de best-sellers españoles se sumó un eco ámplio del tema en los medios de comunicación, con discusiones del mismo en canales de TV, en espacios radiofónicos y en publicaciones periódicas de varios países. Un conocido rotativo francés eligió la publicación del libro como muestra de la apertura que se estaba operando en una España que comenzaba a intentar acceder a la democracia.
También se sucedieron las conferencias, y el estudio mereció ser traducido mientras tanto a siete idiomas, y basados en el mismo han aparecido ya diferentes libros de distintos autores, amén de numerosos artículos en publicaciones que van desde los Estados Unidos hasta Australia.

Muy activos se mostraron en su momento y en sus ataques al libro determinados representantes de la comunidad evangélica, que en un intento fulgurante de evitar que alguna de sus ovejas pudiera caer en la tentación de pensar por sí misma, le mascaron solícitamente el alimento del refuerzo de su fe en oportunas y, ¡cómo no!, insultantes conferencias, precedidas por la correspondiente publicidad callejera.
Cabe recordar que el mismo cardenal Gracias Valerian manifestó públicamente su miedo a que se publicaran estos datos. Alguien quiso incluso frenar la publicación del libro amenazando con la excomunión de su autor; otros —muchos— están empeñadaos en saber de buena tinta que Andreas Faber-Kaiser es musulmán, que el libro está patrocinado por los ahmadíyyas, y otras gratuidades por el estilo. Pero como el fanatismo no calcula, todo ello no contribuyó sino a popularizar aun más el libro.»

Veamos una parte del texto de Andreas Faber Kaiser, describiendo los detalles de la tumba:

La tumba que, fue en principio erigida por Tomás sobre el cuerpo de Jesús, en el sitio exacto donde éste expiró, está situada en el distrito Khanyar, en pleno centro de la ciudad de Srinagar, capital de Cachemira.
En la calle puede verse en un poste de tendido eléctrico un cartel azul con la inscripción en blanco "Rozabal", contracción de las palabas Rauza Bal.

El nombre Rauza se aplica únicamente a tumbas de los profetas, mientras que las tumbas de los santos se llaman Ziarat. El edificio en sí es una construcción rectangular, a la que está adosado un pequeño vestíbulo de entrada.
Detrás del edificio se extiende un camposanto musulmán. Todas las tumbas de este camposanto están orientadas, según la costumbre islámica, de Norte a Sur.
Al penetrar en el Rozabal, se entra primero en una galería, que rodea a la cámara interior. A esta cámara interior se accede a través de un ventana.
A la izquierda de esta ventana está adosado un plafón de madera que sustituye al plafón que llevaba la leyenda original y que ha desaparecido.
El texto de este nuevo plafón encabezado por las palabras "Ziarat Yuza Asaf Khanyar" indica que ahí reposa Yuza Asaf, que llegó al valle de Cachemira muchas centurias antes, y dedicó su vida a la oración y a la prédica de la verdad. Sobre el piso de la cámara interior del edificio se aprecian dos túmulos o losas sepulcrales.
La mayor de ellas, que está situada en la mitad Norte de la cámara, es la que corresponde al sepulcro de Jesús. La losa más pequeña, situada en la parte Sur, o sea contigua a la ventana de comunicación, corresponde a la sepultura de un gran Santo cachemir, Sayyid Nasir-ud-Din.
Estos dos túmulos o losas sepulcrales están también orientadas según la costumbre musulmana de Norte a Sur. Pero la sepultura real de Jesús, situada en la cripta que hay debajo de esta cámara interior del edificio, está orientada de acuerdo con la costumbre judía de Este a Oeste. Según hemos visto, todo este edificio conocido por el nombre de Rozabal ha sido construido sobre el cuerpo de Jesús que yace en su cripta en el lugar y la posición exacta que adoptó al morir.

A la cripta inferior, en la que yace el cuerpo de Jesús, se puede acceder únicamente a través de una escalera desde el exterior del edificio. Hoy , esta escalera está tapiada y sólo queda de la apertura una pequeña rendija que da a la calle situada en el lado Oeste del edificio. Siendo edificio sagrado para musulmanes y también para hindús, para penetrar en él hay que descalzarse previamente. En la cámara interior, los túmulos funerarios de Jesús y de Sayyid Nasir-ud-Din están cubiertos por un armazón de madera artísticamente labrado.

Digamos para finalizar, que entre la gente de Cachemira que visita el lugar y deposita sus ofrendas allí, la tumba es conocida como la de Hazrat Yuz Asaf, o la de Nabi Sahib (el profeta) o Shahazda Nabi (el príncipe profeta), y también como la de Hazrat Isa Sahib (Jesús).

Dice Andreas sobre la muerte de Jesúa:
JESÚS NO MURIÓ EN LA CRUZ
Analicemos desde varios ángulos la real probabilidad de que Jesús no muriera en la cruz.

En primer lugar hay que considerar que Jesús no permaneció muchas horas crucificado.
Fue bajado de la cruz en la tarde del mismo día en que le fue dictada y ejecutada la sentencia.
Jesús fue crucificado en un viernes.El sábado es el Sabbath judío.
Esta circunstancia obligaba a bajar el cuerpo de Jesús antes de la caída de la noche, ya que el día judío comenzaba con la entrada de la noche, o sea que el sábado comenzaba a contar a partir de la noche del viernes.
Estaba prohibido, según las leyes judías, dejar colgado en la cruz a un ajusticiado durante el día sagrado del Sabbath. Insisto en que Jesús sólo permaneció en la cruz durante algunas horas, porque se podía vivir durante varios días en esta horrible condición.
El verdadero objeto de la crucifixión no era la muerte inmediata, sino que era una tortura que se prolongaba a lo largo de 3 ó 4 días. Conviene tener presente que si a un crucificado se le bajaba de la cruz a tiempo y se le trataba cuidadosamente, generalmente se recobraba y sobrevivía.

Considérese ahora que Jesús fue crucificado junto con dos malhechores. Los tres, por lo tanto, están sufriendo un mismo suplicio, como leemos en Lucas (23,40) que un ladrón le dice al otro: "¿Tú tampoco temes a Dios, tú que te hallas en un mismo suplicio?".
Pero resulta que en el momento de bajarlos de la cruz al mismo tiempo que a Jesús, los dos ladrones siguen con vida, por lo cual los soldados romanos les quiebran las piernas para que acaben de morir. Es improbable que Jesús, habiendo sufrido el mismo suplicio, hubiera muerto ya.
 Además Pilato, persona que conocía por experiencia lo que tarda una persona en morir en la cruz, se extrañó de que Jesús hubiera muerto ya.
Cuando José de Arimatea fue a ver a Pilato y le pidió el cuerpo de Jesús, leemos textualmente en Marco (15,44): "Pilato se extrañó de que hubiera ya muerto".

 También es harto conocido el hecho de que cuando el centurión romano prueba si Jesús está muerto hiriéndole con su lanza en un costado, de la herida fluye agua y sangre. Pero de un cuerpo muerto brotan únicamente algunas gotas de sangre espesa.

Un antiguo libro persa, traducido al urdu, cuyo título es Negaris-Tan-i-Kashmir, narra la historia de que el mismo rey que vimos interrogaba a Jesús acerca de su condición, procedencia y enseñanzas, el rey Shalewahin, le dice a Jesús que necesita mujeres que cuiden de él, que le cuiden la casa, que le laven la ropa, que le hagan la comida, etc. El rey ofrece a Jesús cincuenta mujeres. Pero Jesús le replica que él no necesita a ninguna, que nadie tiene que trabajar para él. Pero tanto insistió el rey, que al final Jesús accede a tomar una mujer que le haga la comida, que le lave la ropa, que mantenga limpia su estancia. El mismo libro afirma que esta mujer tuvo hijos de Jesús. Y de esta mujer y de Jesús sería descendiente el señor Sahibzada Basharat Saleem, que nos recibió en su casa de Srinagar.

El actual descendiente directo de Jesús se llama Basharat Saleem, y asegura poder acreditarlo con documentación en mano.

Hay bastante información, además de el libro de Andreas Faber Kaiser, en:
http://www.bibliotecapleyades.net/vida_alien/alien_faber03.htm

1 comentario:

  1. Esta Historia la supe estando en Barcelona,años apox. años 80 la leí en un articulo de una revista y lo comenté con católicos Neocatecumenales, después desapareció esta noticia. CURIOSO, en realidad en la Iglesia todo es mentira, excepto sus tesoros conseguidos con la sangre de inocentes. VERGÚENZA

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