Buena película de acción combinada con un buen argumento, que al menos da que pensar, ya que denuncia la manipulación por parte del gobierno de los Estados Unidos, sobre la posesión de armas de destrucción masiva por parte del gobierno iraquí.
Ambientada en la guerra de Irak, año 2003, y con Matt Damon como el subteniente Miller que se encargará de descubrir el sitio en donde deberían estar las susodichas armas de destrucción masiva. Todas las pistas que le van dando, son falsas, y no encuentra nada por mucho que busque, Esto le da que pensar en que la información ha sido claramente manipulada por su propio gobierno.
Las informaciones que va recibiendo de los contactos militares y políticos, además, se contradicen, con lo que decide investigar por su cuenta. Esto le conducirá a una trama de conflictos entre los supervivientes responsables iraquíes que están esperando la decisión sobre el ejército y las autoridades del país, para tomar una decisión.
La decisión llega cuando los americanos deciden disolver el ejército y la policía iraquí.
Empieza la verdadera guerra.
El film está perfectamente ambientado. La acción transcurre de forma espectacular. Sin grandes efectos especiales pero muy real. Las tomas de helicóptero así como los instrumentos de localización de objetivos, muy acertados.
Dirigida por Paul Greengrass en 2010, e interpretada, además de Matt Damon, por Greg Kinnear, Blenda Gleeson y Jason Isaacs, entre otros.
Recomendable para los amantes del cine de acción.
También recomendable para los que quieran entrar dentro del mundo de intriga de la guerra de Irak.
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