Hay un pasaje bíblico que describe con bastante detalle un hecho acaecido en la antigüedad y que siempre que lo he leído, tengo sospechas de que algo realmente anormal ocurrió sobre las ciudades de Sodoma y Gomorra.
Primero leamos con detenimiento el pasaje. Dice así:
19,1 Los dos ángeles llegaron a Sodoma por la tarde. Lot estaba sentado a la puerta de Sodoma. Al verlos, Lot se levantó a su encuentro y postrándose rostro en tierra,
19,2 dijo: Ea, señores, por favor, desviaos hacia la casa de este servidor vuestro. Hacéis noche, os laváis los pies, y de madrugada seguiréis vuestro camino. Ellos dijeron: No; haremos noche en la plaza.
19,3 Pero tanto porfió con ellos, que al fin se hospedaron en su casa. El les prepraró una comida cociendo unos panes cenceños y comieron.
19,4 No bien se habían acostado, cuando los hombres de la ciudad, los sodomitas, rodearon la casa desde el mozo hasta el viejo, todo el pueblo sin excepción.
19,5 Llamaron a voces a Lot y le dijeron: ¿Dónde están los hombres que han venido donde ti esta noche? Sácalos, para que abusemos de ellos.
19,6 Lot salió donde ellos a la entrada, cerró la puerta detrás de sí,
19,7 y dijo: Por favor, hermanos, no hagáis esta maldad.
19,8 Mirad, aquí tengo dos hijas que aún no han conocido varón. Os las sacaré y haced con ellas como bien os parezca; pero a estos hombres no les hagáis nada, que para eso han venido al amparo de mi techo.
19,9 Mas ellos respondieron: ¡Quita allá! Uno que ha venido a avencindarse, ¿va a meterse a juez? Ahora te trataremos a ti peor que a ellos. Y forcejearon con él, con Lot, de tal modo que estaban a punto de romper la puerta.
19,10 Pero los hombres alargaron las manos, tiraron de Lot hacia sí, adentro de la casa, cerraron la puerta,
19,11 y a los hombres que estaban a la entrada de la casa les dejaron deslumbrados desde el chico hasta el grande, y mal se vieron para encontrar la entrada.
19,12 Los hombres dijeron a Lot: ¿A quién más tienes aquí? Saca de este lugar a tus hijos e hijas y a quienquiera que tengas en la ciudad,
19,13 porque vamos a destruir este lugar, que es grande el clamor de ellos en la presencia de Yahwéh, y Yahwéh nos ha enviado a destruirlos.
19,14 Salió Lot y habló con sus yernos, los prometidos de sus hijas: Levantaos, dijo, salid de este lugar, porque Yahwéh va a destruir la ciudad. Pero sus yernos le tomaron a broma.
19,15 Al rayar el alba, los ángeles apremiaron a Lot diciendo: Levántate, toma a tu mujer y a tus dos hijas que se encuentran aquí, no vayas a ser barrido por la culpa de la ciudad.
19,16 Y como él remoloneaba, los hombres le asieron de la mano lo mismo que a su mujer y a sus dos hijas por compasión de Yahwéh hacia él, y sacándole le dejaron fuera de la ciudad.
19,17 Mientras los sacaban afuera, dijo uno: ¡Escápate, por vida tuya! No mires atrás ni te pares en toda la redonda. Escapa al monte, no vayas a ser barrido.
19,18 Lot les dijo: No, por favor, Señor mío.
19,19 Ya que este servidor tuyo te ha caído en gracia, y me has hecho el gran favor de dejarme con vida, mira que no puedo escaparme al monte sin riesgo de que me alcance el daño y la muerte.
19,20 Ahí cerquita está esa ciudad a donde huir. Es una pequeñez. ¡Ea, voy a escaparme allá ¿verdad que es una pequeñez? y quedaré con vida!
19,21 Díjole: Bien, te concedo también eso de no arrasar la ciudad que has dicho.
19,22 Listo, escápate allá, porque no puedo hacer nada hasta que no entres allí. Por eso se llamó aquella ciudad Soar.
19,23 El sol asomaba sobre el horizonte cuando Lot entraba en Soar.
19,24 Entonces Yahwéh hizo llover sobre Sodoma y Gomorra azufre y fuego de parte de Yahwéh.
19,25 Y arrasó aquellas ciudades, y toda la redonda con todos los habitantes de las ciudades y la vegetacíon del suelo.
19,26 Su mujer miró hacia atrás y se volvió poste de sal.
19,27 Levantóse Abraham de madrugada y fue al lugar donde había estado en presencia de Yahwéh.
19,28 Dirigió la vista en direción de Sodoma y Gomorra y de toda la región de la redonda, miró, y he aquí que subía una humareda de la tierra cual la de una fogata.
Bien. En principio, los "hombres" que visitaron a Lot, eran muy poderosos puesto que dejaron ciegos a los que les asediaban, y además, sabían exactamente lo que iba a suceder y tenían prisa porque el acontecimiento tenía hora, minutos y segundos, por lo que no podían perder tiempo.
19,2 dijo: Ea, señores, por favor, desviaos hacia la casa de este servidor vuestro. Hacéis noche, os laváis los pies, y de madrugada seguiréis vuestro camino. Ellos dijeron: No; haremos noche en la plaza.
19,3 Pero tanto porfió con ellos, que al fin se hospedaron en su casa. El les prepraró una comida cociendo unos panes cenceños y comieron.
19,4 No bien se habían acostado, cuando los hombres de la ciudad, los sodomitas, rodearon la casa desde el mozo hasta el viejo, todo el pueblo sin excepción.
19,5 Llamaron a voces a Lot y le dijeron: ¿Dónde están los hombres que han venido donde ti esta noche? Sácalos, para que abusemos de ellos.
19,6 Lot salió donde ellos a la entrada, cerró la puerta detrás de sí,
19,7 y dijo: Por favor, hermanos, no hagáis esta maldad.
19,8 Mirad, aquí tengo dos hijas que aún no han conocido varón. Os las sacaré y haced con ellas como bien os parezca; pero a estos hombres no les hagáis nada, que para eso han venido al amparo de mi techo.
19,9 Mas ellos respondieron: ¡Quita allá! Uno que ha venido a avencindarse, ¿va a meterse a juez? Ahora te trataremos a ti peor que a ellos. Y forcejearon con él, con Lot, de tal modo que estaban a punto de romper la puerta.
19,10 Pero los hombres alargaron las manos, tiraron de Lot hacia sí, adentro de la casa, cerraron la puerta,
19,11 y a los hombres que estaban a la entrada de la casa les dejaron deslumbrados desde el chico hasta el grande, y mal se vieron para encontrar la entrada.
19,12 Los hombres dijeron a Lot: ¿A quién más tienes aquí? Saca de este lugar a tus hijos e hijas y a quienquiera que tengas en la ciudad,
19,13 porque vamos a destruir este lugar, que es grande el clamor de ellos en la presencia de Yahwéh, y Yahwéh nos ha enviado a destruirlos.
19,14 Salió Lot y habló con sus yernos, los prometidos de sus hijas: Levantaos, dijo, salid de este lugar, porque Yahwéh va a destruir la ciudad. Pero sus yernos le tomaron a broma.
19,15 Al rayar el alba, los ángeles apremiaron a Lot diciendo: Levántate, toma a tu mujer y a tus dos hijas que se encuentran aquí, no vayas a ser barrido por la culpa de la ciudad.
19,16 Y como él remoloneaba, los hombres le asieron de la mano lo mismo que a su mujer y a sus dos hijas por compasión de Yahwéh hacia él, y sacándole le dejaron fuera de la ciudad.
19,17 Mientras los sacaban afuera, dijo uno: ¡Escápate, por vida tuya! No mires atrás ni te pares en toda la redonda. Escapa al monte, no vayas a ser barrido.
19,18 Lot les dijo: No, por favor, Señor mío.
19,19 Ya que este servidor tuyo te ha caído en gracia, y me has hecho el gran favor de dejarme con vida, mira que no puedo escaparme al monte sin riesgo de que me alcance el daño y la muerte.
19,20 Ahí cerquita está esa ciudad a donde huir. Es una pequeñez. ¡Ea, voy a escaparme allá ¿verdad que es una pequeñez? y quedaré con vida!
19,21 Díjole: Bien, te concedo también eso de no arrasar la ciudad que has dicho.
19,22 Listo, escápate allá, porque no puedo hacer nada hasta que no entres allí. Por eso se llamó aquella ciudad Soar.
19,23 El sol asomaba sobre el horizonte cuando Lot entraba en Soar.
19,24 Entonces Yahwéh hizo llover sobre Sodoma y Gomorra azufre y fuego de parte de Yahwéh.
19,25 Y arrasó aquellas ciudades, y toda la redonda con todos los habitantes de las ciudades y la vegetacíon del suelo.
19,26 Su mujer miró hacia atrás y se volvió poste de sal.
19,27 Levantóse Abraham de madrugada y fue al lugar donde había estado en presencia de Yahwéh.
19,28 Dirigió la vista en direción de Sodoma y Gomorra y de toda la región de la redonda, miró, y he aquí que subía una humareda de la tierra cual la de una fogata.
Bien. En principio, los "hombres" que visitaron a Lot, eran muy poderosos puesto que dejaron ciegos a los que les asediaban, y además, sabían exactamente lo que iba a suceder y tenían prisa porque el acontecimiento tenía hora, minutos y segundos, por lo que no podían perder tiempo.
¿Como es posible que los enviados de Yahwéh Dios, tuvieran tanta prisa? ¿A Dios no le venía de unas horas, puesto que tiene todo el poder en sus manos? ¿O sí?¡Todo indica que lo que fuera, estaba programado con exactitud!
¿Como un Dios tan -teóricamente- bondadoso puede infringir tan terrible castigo a unas ciudades enteras, con la cantidad de niños inocentes que seguramente perecieron junto a la población adulta? ¿Que culpa tenían los niños inocentes?
Lo extraño es que hasta tiraron de Lot para llevárselo a las afueras y refugiarse deprisa en las montañas y le prohibireon que mirara hacia atrás. Las piedras los protegieron de la radiación.
En 19.26, leemos que "su mujer miró hacia atrás y se volvió poste de sal".
Extraño. Muy extraño.
Aunque con los conocimientos actuales sobre los terribles efectos de una explosión nuclear, ya a nadie le sorprende que la mujer de Lot muriera instantáneamente.
La ubicación de Sodoma y Gomorra es difícil. Téngase en cuenta que si fue un impacto nuclear, y teniendo en cuenta el pequeño tamaño de las ciudades de aquella época, no quedó ni el más mínimo rastro. En el sitio del impacto, se supone que está el Mar Muerto, o al menos es lo que suponen algunos arqueólogos.
Entre los más entusiastas de esta teoría, esta el estudioso británico Michael S. Sanders, experto en arqueología bíblica, egipcia y asiria.
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